sábado, 31 de marzo de 2012

Un largo sueño de treinta mil años

Cómo se ve que nuestros tiempos son diferentes. La Bella Durmiente de Perrault “sólo” durmió cien años y se ha convertido en un ser mítico, pero, claro, es un cuento, ¿qué hubiera escrito el mismo autor, recopilador más bien si hemos de ser exactos, de haber sabido entonces que había quien aventajaba a su heroína, y que no era humana precisamente?

Supongo que, a fuer de escritor, y basándose en la noticia, la hubiera transformado en otro cuento, porque elementos existen para hacerlo; la noticia resulta casi increíble, y sin embargo cierta aunque con sus variantes respecto al cuento clásico, cómo no podía ser de otra manera.

Para empezar no es una Bella Durmiente, son varias y no son humanas sino vegetales y su largo sueño ha durado nada más, ni menos, que la friolera de 30000 años.

Hace mucho tiempo leí que se habían descubierto en una tumba egipcia, varias semillas del tiempo de los faraones y que se plantaron a ver que sucedía, y no pasó gran cosa porque las matas resultantes nacieron y murieron sin pena ni gloria, pero ahora ha sido diferente.

Y tan diferente. Las semillas dormían un congelado sueño en el ártico dentro del escondrijo de una previsora ardilla que, desgraciadamente para ella, nunca llegó a comérselas. Pasaron los años. Transcurrieron los siglos, los milenios, y las semillas, con la vida suspendida en su interior, ajenas a lo que sucedía en torno suyo -luchas, guerras, desastres-, mientras nacían y morían civilizaciones, en fin, lo acostumbrado que hemos dado en llamar “hechos históricos”, dormían tranquilamente en una pequeña eternidad sin ver, ni oír, ni saber nada que turbase su paz interior de durmientes perfectas. Transcurrió el tiempo sin ser medido y un remoto día llegaron los príncipes azules convertidos en científicos rusos, las descubrieron y las despertaron, y las durmientes semillas que habían hibernado 30000 años en el noroeste de Siberia germinaron, empezaron a echar hojas, tallos, y más tarde, siguiendo su programa, flores. Sencillas flores blancas (la foto de prensa salió en blanco y negro) de cinco pétalos, muy normales, o sea nada prehistóricas, nada extrañas, que si no fuera por lo que sabemos, nadie hubiera podido señalarlas con el dedo como si se tratara de fenómenos de feria.

Supongo que estas flores, las más viejas del planeta, el único cambio que deben haber notado, a menos que estén en un invernadero especial, es que el clima no es el que era.

Me gustaría saber cuáles fueron sus sueños durante tan largo lapso de tiempo; no son androides para soñar con ovejas eléctricas, ¿en qué soñaron en realidad?...

Sea lo que fuere, bienvenidas al 2012.
---
UN LARGO SUEÑO DE TREINTA MIL AÑOS Copyright 2012 Estrella Cardona Gamio http://lacomunidad.elpais.com/estrellacardonagamio/2012/3/31/un-largo-sueno-treinta-mil-anos

jueves, 22 de marzo de 2012

Entrevista a Antonio Montiel por Estrella Cardona Gamio

Antonio Montiel es un pintor retratista de reconocida fama y valía tanto dentro como fuera de nuestras fronteras. El rey de España, la reina Doña Sofía, han sido retratadas por él, así como también importantes personalidades del extranjero, la reina Isabel II de Inglaterra, por ejemplo, y en España un largo etcétera de celebridades desde Cayetana de Alba, Montserrat Caballé, han posado para Antonio Montiel, siendo una de las primeras la actriz Marisol. Pero esta es una historia, que el propio Antonio nos contará. Sigue leyendo: Entrevista a Antonio Montiel por Estrella Cardona Gamio.

Entradas populares